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Mai
2018

Los motivos para una crisis en el Atltico

Los motivos para una crisis en el Atltico

Con Simeone desgastado, sin el calor del Caldern y con mltiples problemas de cara al gol, el equipo rojiblanco nunca estuvo peor a estas alturasCrnica: El Atltico descarrila en el Pizjun"La posicin actual del club te obliga a ganar o tener que ganar". Y de esa posicin de la que hablaba Simeone antes de viajar a Sevilla es bastante culpable l. Por eso, que el Atltico est segundo en Liga con una sola derrota ya no sirve de coartada. Mucho menos despus del primer resbaln en Champions y, sobre todo, tras ser expulsados de la Copa por el Sevilla con cinco goles en contra. O, lo que es lo mismo, el peor enero del tcnico argentino desde que lleg en 2011. Un extrao presente para el club rojiblanco, en un curso condicionado por muchas distracciones. Una dura mudanzaA Griezmann, primer goleador del Metropolitano, le cost encontrar un rincn para su celebracin tras batir la portera del Mlaga un mes despus de empezar la temporada. Del exilio obligado para rematar las obras del nuevo estadio, al aterrizaje forzoso y forzado sobre un csped extrao. "Estos procesos necesitan su tiempo", sostenan desde los despachos del club. Entre los pasillos de esa lujosa mansin, el Atltico acab perdido en la Champions (gan uno de los tres partidos, empatando con el Qarabag). Y casi tambin lo hizo en la Copa, con ese lapsus final que dej al Sevilla mirando a semifinales. En Liga, hasta la fecha, slo respir tranquilo, curiosamente, ante el propio Sevilla (2-0). El resto (cuatro victorias y cuatro empates), sufrimiento y dudas. El Girona, el sbado pasado, fue el ltimo en despertarlas. El lastre de la sancin FIFANada ms conocer la decisin del TAS, Simeone dio un par de rdenes bien claras. La primera, no vender a nadie hasta enero. La segunda, ingenirselas como fuera para disponer de Vitolo y Diego Costa en el segundo acto del curso. Ambos deseos, incluido el de mantener a Griezmann (que aplaz su deseo de irse) se cumplieron. Slo que aquello provoc que algunos jugadores con las maletas listas acabaran quedndose en Madrid para contar con una segunda oportunidad algo spera. Hoy Vietto se encuentra en Camiseta de Valencia y Gaitn, esperando destino. Probablemente, Gameiro tampoco habra estado ah. Sin gol, sin estrellaFalcao, Diego Costa y Griezmann, por este orden, han dado sentido a las diferentes apuestas de Simeone. Sus Atlticos siempre han contado con algn futbolista con nmeros y maneras de crack Mundial. Hasta este 25 de enero, lo ms parecido a eso, por sensaciones, han sido los cinco partidos de Diego Costa (tres goles y dos asistencias). Porque Griezmann, renovado en junio con vocacin de marcharse, nada tiene que ver con el de las tres temporadas previas. Ya no es la llave que abri tantos partidos. Ha llegado a ser pitado y su tcnico ya no se lo piensa si tiene que sacarle del campo antes de tiempo. Esos goles suyos son los que echa de menos su equipo, con slo 29 en 20 jornadas de Liga. El peor registro del Cholo y, tambin, la mayor sequa desde la 2006/07, en el estreno de Aguirre, con slo 26. Errores como el de Correa en el Pizjun ejemplifican la psicosis frente al portero rival. Seis aos de desgasteSimeone pis de nuevo Madrid en diciembre de 2011. Y en estos siete aos, con seis temporadas completas, slo una vez lleg a plantearse si tena sentido lo que estaba haciendo. Fueron las horas posteriores a la derrota en la final de Miln (2016). Aquello marc parte del curso pasado. Este ao se ha encontrado sin respuestas al sudoku del Qarabag en Europa. Y la grada ya hasta se atreve a discutir algunas de sus decisiones. "Soy responsable de la eliminacin de Copa y Champions", dice. En Liga, pese al segundo puesto, firma su segunda peor puntuacin. Gazapos (groseros) en defensa De un cabezazo seccion el Girona, en la ltima jornada de Liga, una defensa entera. En varios despistes rojiblancos apag el Sevilla cualquier amago de remontada. An resuena aquel ltimo ante el camisetas de Chelsea o los siete centros laterales que suponen siete de los nueve goles recibidos en Liga. Slo Oblak, que no jug en Copa, est fuera de toda sospecha. La nula aportacin ofensiva de los laterales tambin es un factor a tener en cuenta en esta ecuacin.